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Nuestras lámparas de luz roja están diseñadas para emitir una frecuencia específica de luz similar a la luz solar, pero centrándose en aquellas longitudes de onda que se consideran especialmente beneficiosas para el bienestar, 660 y 850 nanómetros.
La exposición a la luz roja puede tener impactos positivos en diferentes aspectos, como mejoras en el sueño, alivio del estrés y la promoción de procesos biológicos esenciales.
Este tipo de frecuencia tienen la capacidad de estimular la producción de energía celular, lo que a su vez puede tener efectos positivos en el bienestar general.
Además de sus posibles beneficios fisiológicos, las lámparas de luz roja también se valoran por el agradable calor que emiten. Este calor suave no solo brinda confort, sino que contribuye a crear un ambiente relajante durante la terapia, resultando no solo es beneficiosa desde el punto de vista físico, sino que también produce impactos positivos en el estado de ánimo y la sensación general de bienestar.
El sol nos brinda el espectro rojo e infrarrojo que es necesario para que dentro de nuestro cuerpo se repliquen miles de procesos biológicos imprescindibles para para el ser humano.
Lamentablemente, la vida moderna muchas veces no deja tiempo para que cuidemos de nuestra salud y resulta muy complicado exponerse diariamente a la luz del sol del amanecer y atardecer.
Esta lámpara estratégicamente proporciona luz roja e infrarroja beneficiosa para el cuerpo humano, imitando el espectro beneficioso de luz presente durante el amanecer y el atardecer.
Tus células necesitan la luz roja e infrarroja para producir energía. Es el momento de alimentarlas.
Es recomendable que la lámpara de luz roja no tenga parpadeo (flicker free)
Al ser una luz continua y sin parpadeo, no solo mejora la comodidad visual, sino que también contribuye al bienestar general, especialmente en aquellas personas propensas a sufrir migraña.
Nuestras lámparas no tienen parpadeo (Flicker free) y el campo electromagnético (CEM) es prácticamente nulo.
Irradiación electromagnética EMF extremadamente baja.
Nuestras lámpara de luz roja cuentan con led de doble chip, una innovación excepcional que combina la potencia de dos avanzados chips por led para ofrecer una iluminación roja potente y de alta calidad.
Con su doble chip, esta lámpara proporciona una intensidad lumínica óptima, asegurando una iluminación uniforme y efectiva.
Ya sea utilizada para crear un ambiente relajante en el hogar o como parte de un enfoque más amplio en la terapia de luz roja, esta lámpara con doble chip representa una herramienta avanzada para aquellos que buscan aprovechar las propiedades positivas de la luz roja en su vida diaria.
La elección de utilizar específicamente las longitudes de onda de 660 nm y 850 nm en nuestras lámparas de terapia de luz roja, se basa en sólida evidencia científica y consideraciones prácticas. Utilizamos únicamente 660 nm (roja visible) y 850 nm (infrarroja cercana).
¿Por qué estas y no muchas otras más?
Porque son las más estudiadas científicamente y las que cuentan con mayor respaldo clínico en aplicaciones terapéuticas.
Numerosos estudios han demostrado la eficacia de estas longitudes de onda específicas:
660 nm (luz roja visible): Esta longitud de onda ha mostrado beneficios significativos para la piel, incluyendo mejoras en la producción de colágeno, reducción de arrugas y cicatrización de heridas.
850 nm (infrarrojo cercano): Penetra más profundamente en los tejidos, mostrando efectos positivos en la recuperación muscular, reducción del dolor y mejora de la función mitocondrial.
Aunque existen otras longitudes de onda como 810 nm, 808 nm y 720 nm que también han mostrado beneficios, la eficacia de una lámpara de terapia de luz roja depende en gran medida de la densidad de fotones que llegan a los tejidos. Al concentrarnos en solo dos longitudes de onda, podemos garantizar una mayor densidad de LEDs para cada frecuencia, lo que resulta en una dosis terapéutica más efectiva.
Una lámpara multifrecuencia con solo 5 o 10 LEDs por frecuencia, no proporciona suficientes fotones para lograr un efecto terapéutico significativo. Por el contrario, nuestro apuesta en 660 nm y 850 nm asegura que se entregue una dosis óptima de cada longitud de onda, maximizando los beneficios terapéuticos.
En el diseño de nuestras lámparas de terapia de luz roja Wellnes, hemos optado por reducir al mínimo los componentes electrónicos. Esta decisión se basa en la fiabilidad y longevidad del producto:
La experiencia ha demostrado que un simple botón de encendido/apagado manual es significativamente más duradero y fiable que un panel electrónico complejo. Los paneles electrónicos, aunque son muy atractivos, son más propensos a fallos y averías con el tiempo.
Mayor durabilidad: Menos componentes significa menos puntos de fallo potencial.
Facilidad de uso: Un botón simple es intuitivo y accesible para todos los usuarios.
Mantenimiento reducido: La simplicidad del diseño facilita cualquier reparación necesaria.
Confiabilidad a largo plazo: Un mecanismo simple tiene menos probabilidades de deteriorarse con el uso prolongado.
Apostamos por lo que funciona, no por lo que parece más moderno. Tecnología útil, fiable y centrada en el bienestar.
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